Con la llegada de las vacaciones de invierno, todos nos preguntamos ¿Qué hacemos?, a veces salimos de viaje, otras no. Lo importante es disfrutarlas en familia, aprovecharlas para hacer actividades diferentes con los niños, cambiar de rutina es muy positivo, es una forma de construir hábitos saludables.
Al igual que a nosotros, a los niños les encanta las vacaciones, el pensar dónde ir, que van a comer, que hacer, les despierta y potencia los niveles de felicidad. Es muy importante recordar que cuando los niños son felices, vos también lo sos, deja que tus hijos participen en la planificación de las actividades de estas vacaciones para que no lo vean como otra obligación más.
Los niños tienen una gran capacidad de absorción de la información, en especial cuando tienen entre 6 meses y 3 años. Cuando compartimos con ellos nuevas actividades, o salimos de viaje en familia, no solo aprenden a relacionarse y hacer amigos, sino que también desarrollan nuevos intereses. Aprovechemos estas vacaciones para sumar a su vida movimiento y variedad en su alimentación.
Durante las vacaciones los niños se mueven mucho más, corren, juegan, aprenden a andar en bicicleta…, nuevas experiencias y sensaciones que hacen que se liberen neurotransmisores del bienestar (la oxitocina y la dopamina) que juegan un papel fundamental en el desarrollo de su carácter y de sus relaciones sociales con otros niños, además de sumar la sensación de movimiento ligada a felicidad.
La creatividad es la clave en la alimentación, cuando sacamos a los niños de su rutina y rompemos con su entorno cotidiano, la escuela, exámenes, deberes y clases, le damos rienda suelta a su creatividad. Se creativo en la presentación de los platos y en la planificación del menú. Presenta los platos de manera atractiva, combinando los colores de los alimentos. También hace partícipe a los niños de la planificación de las distintas comidas durante estas vacaciones, incluí sus comidas favoritas e incorporando nuevas preparaciones saludables.
Las vacaciones son el momento ideal para estrechar lazos con los niños. Es el momento en que podemos centrarnos únicamente en nuestros hijos y disfrutar con ellos.
Además, el cambio del entorno y de la rutina también nos permite crear nuevas memorias juntos, que van a querer repetir toda su vida. Seamos creativos en estas vacaciones de invierno, hagamos que sean inolvidables, un hábito saludable que se consigue en un entorno entretenido dura toda la vida.
CONCEJOS SALUDABLES PARA ESTAS VACACIONES:
Mantener y respetar los horarios de comidas, es importante que sean libres de televisión, tablet y celular.
Incorporar legumbres, el invierno es una buena instancia para fomentar el consumo de legumbres, ya sea en guisos o ensaladas tibias, al menos dos veces a la semana.
Fomentar un adecuado consumo de verduras. Una buena opción es, las sopas naturales de verduras, como zapallo, zanahoria, tomate, acelga, espinaca, entre otras. Así también podemos incorporar budines, tortillas y guisos.
Fomentar el consumo de frutas, variar el postre con distintas frutas de la temporada, ya sean frescas, cocidas o asadas, servidas solas o mezcladas con yogurt o algún tipo de cereal alto en fibra (integral).
Reducir el consumo de hidratos de carbono simples. Incorporar el agua o jugos libres de azúcar, evitando los jugos y bebidas azucaradas.
Disminuir el consumo de grasas saturadas, incluir de forma aislada los embutidos y alimentos altos en grasas saturada como la manteca.
Suma minutos de juego, de actividad física, de felicidad.
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